jueves, 14 de mayo de 2009

PERFIL DEL MEDIADOR

El papel más importante del mediador, según lo entendemos personalmente, es el de servir de canal para facilitar la comunicación entre las partes. Esto no significa que el mediador interpreta lo que una parte dice para explicarle a la otra parte, o que el mediador hace de "correo" entre las partes. El mediador les facilita a las partes las herramientas necesarias para entender el problema que se les presenta, con la finalidad de resolver conflictos de manera extrajudicial, ágil y económica.
Por lo tanto el mediador es un profesional especializado en manejo de conflictos que ayuda imparcialmente a las partes a buscar un acuerdo voluntario para poner fin a la controversia existente.
El perfil del mediador capacitado para el manejo de conflictos debe revestir las siguientes cualidades:
1.- Neutralidad: La cualidad más importante de un mediador eficaz es su capacidad de mantener un papel imparcial y neutral en medio de una controversia.

2.- Capacidad: Para abstenerse de proyectar su propio juicio. El rol del mediador es ayudar a que las partes lleguen a un acuerdo cuyos términos sean aceptables para ellas, aun cuando el mediador esté en desacuerdo con la sabiduría o con la justicia de la solución.

3.- Flexibilidad: Debe estimular la fluidez en las comunicaciones.
4.- Inteligencia: Las partes buscan un mediador que les facilite el camino de la resolución, con una mentalidad ágil y eficaz.
Debe ser capaz de ver las cuestiones en múltiples niveles, de tratar hechos complejos y de analizar los problemas.

5.- Paciencia: Es importante que el mediador pueda esperar los tiempos necesarios según lo requieran las partes.
6.- Empatía: El mediador debe de ser capaz de valorar las percepciones, miedos e historia que cada parte revele en la discusión. La confianza se instala a partir de esta corriente personal.

7.- Sensibilidad y respeto: El mediador debe ser respetuoso con las partes y sensible a sus fuertes sentimientos valorativos, incluyendo sexo, raza y diferencias culturales.
8.- Oyente activo: Las partes deben sentir que el mediador ha oído las respectivas presentaciones y dichos.
9.- Imaginativo y hábil en recursos: Es importante que el mediador tenga capacidad de aportar y generar ideas nuevas.
10.- Enérgico y persuasivo: A través de la conducción del proceso, el mediador debe intervenir eficazmente para lograr flexibilidad en las partes, aunque debe dirigir la dinámica y controlar la audiencia sin ser autoritario.
11.- Capacidad para tomar distancia en los ataques: Si alguna de las partes hace un comentario despectivo o agresivo hacia el sistema de mediación o hacia el mediador, es conveniente no actuar a la defensiva, de lo contrario se establecería una nueva disputa.

12.- Objetivo: El mediador será más efectivo si permanece desligado del aspecto emocional de la disputa
Cada una de estas cualidaddes que hemos destacado, se van cultivando con la práctica en el arte de la Mediación, consiguiendo acuerdos desde el seno de nuestro hogar, con nuestros hijos y connuestra pareja, en ambientes laborales, con nuestros compañeros y con nuestro superior jerárquico y con personas ajenas a nuestro diario vivir, para con ese entrenamiento entrera a conocer conflicteos de terceros don pongamos en práctica nuestras cualidades adquiridas.
Los invito a practicarlas en nuestro diario vivir.
Con aprecio.
M.S.c. JULIO EUVIN DIAZ